Sole Gimenez -
Pilar Sánchez se ha enrocado en su castillo y está muy preocupada. No es para menos. Si este martes se mantiene su imputación en el caso de los asesores y el asunto sigue en los tribunales, su candidatura corre serio peligro. Es la verdad. El presidente de la Junta de Andalucía, el socialista Pepe Griñán, en relación con el grave asunto de Mercasevilla advirtió de que si el delegado de Empleo en Sevilla, Antonio Rivas, seguía «imputado al término de la fase de instrucción», tendría que dimitir. «No podrá seguir en el cargo si cuando concluya la fase sumarial sigue imputado», ya que «tendrá que dedicarse a articular su defensa». Y esa es la posición de Griñán, no piensa llevar en las listas del PSOE a nadie que esté imputado. Es lo que hay. Tan preocupada está que olvida a muchos y muchas que le aprecian. Grave error. En lo que vamos muchos coincidiendo es en la nefasta influencia que tuvo el adulador asesor en la sombra en muchas de las decisiones de la alcaldesa. Cada cosa que me entero es peor que la anterior. Y lo malo para él es que en el partido son mayoría los que opinan negativamente.
