Así vamos a tener que llamar a la consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo. Lo de hoy es de traca. El Consejo de Gobierno ha aprobado la reordenación del sector público de la Junta de Andalucía, que supondrá un ahorro total de más de 100 millones de euros hasta 2013, así como la desaparición de 111 entidades instrumentales y la modificación o transformación de otras 16, según ha informado la consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo.
¿Implica esto reducción de costes laborales? Pues no, ni de coña. Otras disposiciones se dirigen a ofrecer las máximas garantías de salvaguarda de sus derechos laborales al conjunto de los 23.476 empleados públicos de la Junta de Andalucía y de sus entidades instrumentales afectados por la reordenación. En este sentido, el plan conlleva la eliminación de entidades pero no de puestos de trabajo. Además, se respetan los convenios colectivos en vigor.
La integración del personal funcionario en una agencia pública empresarial será voluntaria y conllevará el mantenimiento de su estatus laboral previo. Además, se le reconocerá el tiempo de servicios prestados en la Administración a efectos de retribuciones por antigüedad. De igual modo, en caso de reingreso, el tiempo de permanencia en la agencia se le computará para el reconocimiento de trienios. El trabajo desarrollado en los entes instrumentales también será considerado en los concursos de méritos.
Por su parte, el personal laboral procedente de las entidades suprimidas se integrará en las nuevas resultantes de acuerdo con las normas reguladoras de la sucesión de empresas recogidas en el Estatuto de los Trabajadores. (Más info)