25 sept 2011

Los nuevos 'indignados' municipales


loquillo y los trogloditas - Feo fuerte y formal


Es lo que tiene la cosa, les tocas el bolsillo y te arañan, como poco. Me refiero al primer plan de ajuste del gobierno de centro derecha de Jerez, que preside María José García Pelayo. Los altos cargos no quieren perder poder adquisitivo pero me temo que a los más de treinta mil parados y paradas de Jerez les importa un pimiento toda esta vaina. Y a los pobres sufridores de la huelga de autobuses, menos. Y a las empleadas de la dependencia, mucho menos y a los que nunca pudieron acceder en igualdad de condiciones a una plaza municipal, a esos, a esas, les importan una mierda las quejas de los nuevos 'indignados municipales'. Pregunten en Jerez y se sorprenderán. Esto es un pueblo grande.


Esto acaba de empezar y me temo que se va a montar una muy Padre y Señor Mío. Pero es que algo tiene que hacer el PP, y debe ser en el primer año de gobierno. Tal como debió hacer Pilar Sánchez. Estoy no hay quien lo aguante, y eso lo sabe hasta el más tonto de la clase. Pero en vez de involucrarlos a todos con habilidad, Pelayo ha puesto un documento con 37 medidas nada creativas sobre la mesa. Y claro.

La gatera municipal ha sido la forma de entrar en la plantilla desde tiempo inmemorial, admitido por sindicatos y partidos. Por eso creo que el cabreo de los 'indignados municipales' tiene poco futuro, a no ser que inicien una huelga de celo (algo he escuchado hoy en un bar), porque la tijera ha comenzado a dar tajos y no va a parar. Por cierto, que cuando haya pasta no estaría mal una comisión de control del pago, para evitar tentaciones más que otra cosa.


Pelayo no puede fracasar, porque si le ganan la partida a las primeras de cambio, nadie la respetará. Y hay demasiados ojos mirando en estos momentos. Amén de los que la observan con cariño frotándose las manos por la dulce venganza. Pelayo va a tener una semana apasionante, a la berza jerezana no le va a faltar de nada. El ala dura sigue mandando y mucho. Pena. Por cierto, aviso a navegantes: la familia es sagrada. Ojo con los desprecios a la gran familia munisipá.