¿Podría obedecer la consentida marea republicana a una estrategia perfectamente diseñada? Visto lo visto desde 2004, algunos quizás sueñen con que Zapatero quiera ahora un uniforme y ser comandante en jefe de todos los Ejércitos, desplazando de esa ocupación -previa reforma constitucional vía referéndum- al Rey de España. Todo ello tras ser designado presidente de la III República y obtener una clara victoria en las próximas elecciones generales. Pero yo me niego a creer tal hipótesis, acariciada por más de uno y una en nuestro país. No puede ser cierto. Es que sería muy fuerte ¿no creen? Muchos nos preguntamos qué pasa en España.
Pero, un momento ¿por qué España no tiene derecho a decidir ya y pasar de una monarquía a una república? Nada ni nadie lo puede impedir si ese es el deseo del pueblo español, cuya voz y voto en Las Cortes delegan cada cuatro años en los partidos políticos ¿Ruido de sables hoy en día? Ni por asomo.
Somos un país maduro, pero no lo suficiente para haber soportado una decisión, en 2004, que era la que había que haber tomado: aplazar las elecciones generales. Hubiera sido lo apropiado, porque un país en estado de shock no debía haber votado. ¿Debió el Rey tener en cuenta ese aspecto si es el garante de nuestras libertades civiles desde que intervino a favor de la libertad durante el golpe de Estado? Solo Aznar y el Rey saben si tal posibilidad se llegó a sopesar realmente. Pero no creo que, de existir, tales conversaciones salgan nunca a la opinión pública, como ha pasado días atrás con un documento clasificado que nos ha desacreditado ante países aliados.
No me gusta nada lo que pasa en España, no adivino el origen verdadero de la marea republicana. Pero no me gusta, y de paso les digo que no creo que el Rey esté solo, la verdad. Las apariencias engañan, otra cosa es que al personal le caigan ya más simpaticos los Príncipes de Asturias.