Hay rumores y rumores, la verdad. Algunos tienen base y otros son producto de mentes calenturientas, habladurías de la calle o inventos de periodistas ociosos para dar por saco. Es así. Pero el rumor político de que Griñán necesita un nuevo consejero de Empleo y que mi paisano Antonio Fernández ya lo le vale, es lo mismo que le pasa a ZP con ese desastre de ministro de Trabajo que es Celestino Corbacho. A ver, si Fernández ya no tiene mucho futuro aquí por sus lealtades a Chaves y al anterior equipo del PSOE (quiero imaginar que es por eso) lo lógico es que se busque la vida cuanto antes. Le queda montar un bufete, presidir una de esas empresas satélite de la Junta, venirse a Jerez a ser, de nuevo, candidato a la alcaldía o...ser ministro de Trabajo.
Fernández, a quien todos conocemos como "el gitano", de forma cariñosa, no es un mal tipo y vale para todo, se lleva bien con los sindicatos, gitanea con los empresarios (algo fácil cuando se manejan recursos públicos ingentes) y tiene golpes ocurrentes en los aburridos consejos de gobierno. A mí nunca me ha caído mal, la verdad, y soy de los pocos que le dió algo de vida mediática cuando algunos compañeros (já) decretaron su defunción política.
No creo que ZP se lo lleve a Madrid, la verdad, creo que su futuro está en Andalucía. No voy a contar más, y sé que esta posibilidad madrileña sorprenderá a propios y extraños, pero está basada en indicios incluso más allá de lo fìsico. Antonio me entenderá. Suerte paisano, ya se sabe que a los de Jerez siempre nos toca lo peor. Un abrazo.
Dice José Aguilar en su columna del Grupo Joly que "al hombre de Chaves por antonomasia, Luis Pizarro, lo quitará de vicesecretario general y de consejero de la Junta. En cuanto a los aparatos provinciales, habituados a la posición de firmes, no les va a costar ningún trabajo cambiar sus lealtades. Ahora toca obedecer a Griñán. Hasta se han comprometido a evitar que haya listas alternativas en la elección de los delegados al congreso. Las minorías críticas que tienen cuentas pendientes en Sevilla, Málaga o Cádiz las dejarán para otra ocasión". Corren tiempos duros donde nada es para siempre y hay que elegir bien el lado del camino". David Fernández, director de Diario de Jerez, expresa un deseo en su artículo de hoy: "Ojalá dicho congreso sirva para tomar decisiones y aclarar las ideas, y, sobre todo, para que se acaben las disputas y trabajen por Jerez, únicamente. De lo contrario, la alcaldesa y su grupo de colaboradores lo pasarán mal en el futuro, y los jerezanos, por supuesto".
Y Pepe Landi, manejando información pata negra, pone el dedo en la llaga socialista: "Al otro lado, los oficialistas también temen... Pero por perder su puesto. Admiten -siempre que haya anonimato- que Griñán ha dejado ver su predilección -por ejemplo, al nombrar consejeros- por el alto perfil técnico y el bajo cariz político. Es un líder algo más alejado de las mesas-camilla, las camarillas, las intrigas y las familias. Ha hecho pública su intención de abrir paso a líderes de entre 35 y 45 años con nuevas actitudes. Esta presunción es una bomba en lugares como la Diputación, convertida en una oficina de colocación color de rosa. Para localizar a los inquietos, sirve un dato: 21 de 59 miembros de la Ejecutiva Local gaditana (uno de cada tres) tiene un cargo o empleo en la estructura provincial de la Junta o en la propia Corporación. La renovación terminaría por alcanzar a los denominados pesebres y nadie va a decir lo que piensa para arriesgarse a ser uno de los pocos que entre en 'plan renove', sea o no en versión maquillaje, ahora o en 2012".
