Ni caso: la comisaria europea de Pesca, Maria Damanakis, ni presta atención ni muestra sensibilidad alguna hacia los intereses de las flotas artesanales y almadrabas andaluzas a la hora de definir la posición europea durante la asamblea de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat) que se celebra hasta el próximo sábado en París. En dicha asamblea se someten de nuevo a revisión los totales admisibles de capturas (TAC) de atún rojo en todo el mundo. Hay mucha preocupación en el sector almadrabero andaluz porque los grandes de la distribución alimentaria en Europa han firmado un manifiesto en el que se comprometen a no comprar atún rojo mientras que esta pesquería no garantice la conservación de la especie.
La consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, opina que la comisaria europea de Pesca se ha caracterizado por hacer "oídos sordos" a las propuestas de la Administración andaluza y del sector pesquero durante las sesiones de Iccat desde que se inició la asamblea el pasado día 17. Tanto la delegación del sector pesquero andaluz como los representantes de la Junta han podido comprobar que además Damanakis ha "ignorado hasta este momento la posición conjunta que han adoptado varios países mediterráneos para defender la viabilidad de continuar pescando de forma sostenible atún rojo y pez espada", según ha señalado en una nota la Administración andaluza.
La Consejería de Agricultura y Pesca defiende en todo momento que se mantenga el TAC actual y no admitir una reducción, ya que los informes científicos no indican la necesidad de nuevos recortes en las capturas para cumplir con el plan de recuperación del atún rojo. Cabe recordar que el atún rojo genera en Andalucía una importante actividad económica, con más de 1.100 empleos directos que dependen de la pesca de esta especie. La pesquería del atún rojo es un sector clave en las provincias de Cádiz y Almería, con una cifra de ventas superior a los 21 millones de euros.