15 nov 2010

Pulido se confiesa ante Ávila


O es un paripé o es como se tienen que hacer las cosas. No cabe término medio. Pero nadie, en su sano juicio se puede creer que el presidente de Cajasol, el socialista Antonio Pulido, no haya informado, usando el canal el recurso que sea, a la Junta de Andalucía sobre sus intenciones acerca de Banca Cívica.


Conviene no olvidar que la incorporación de Cajasol al Grupo Banca Cívica, conformarían un grupo financiero con más de 75.000 millones de euros de activos, que se situaría en la quinta posición del ranking de Cajas españolas por activos.Una grave decisión con cajas alejadas de la órbita pura y dura del PSOE

Y también es conveniente tener en cuenta que una vez hayan acordado los órganos de Gobierno de Cajasol su incorporación al grupo, corresponderá a las autoridades administrativas autorizar el proceso, principalmente, al Banco de España, a la Comisión Rectora del FROB respecto a los posibles apoyos financieros, y al titular de la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia en cumplimiento de las previsiones de la Ley de Cajas de Ahorros de Andalucía.


El consejero de Economía, Innovación y Ciencia, Antonio Ávila, ha mantenido un encuentro institucional con el presidente de Cajasol, Antonio Pulido, reunión en la que éste le ha presentado la propuesta de protocolo de integración de la entidad en el grupo financiero Banca Cívica. Pulido ha expuesto al consejero las líneas maestras del proyecto que será sometido a la consideración del Consejo de Administración de la Caja de Ahorros, deferencia que ha agradecido el consejero.

Una de las fórmulas por la que están optando muchas Cajas de Ahorros en su proceso de redimensionamiento es la de constituir sistemas institucionales de protección (SIP), fórmula desconocida hasta ahora para el sistema financiero español (aunque en funcionamiento en otros países europeos) que ha sido objeto de regulación reciente en nuestro país, y que se ha revelado como fórmula igualmente válida que la fusión para conseguir los objetivos perseguidos.De hecho, de los 13 procesos de integración en marcha entre las Cajas españolas, cuatro de ellos son SIP, que están afectando a 21 entidades que representan el 45% de los activos del sector.

Así, las entidades que integran el SIP asumen el compromiso mutuo de garantizar las necesidades de liquidez y solvencia de todos sus integrantes, lo cual proporciona a todos sus miembros una importante red de seguridad para afrontar los importantes retos a los que se está enfrentando el sector financiero. Al mismo tiempo, las Cajas conservan su personalidad jurídica, es decir, mantienen su identidad, su domicilio social, conservan sus órganos de gobierno y siguen gestionando de forma autónoma su obra social.