Ayer, en elEconomista, contamos los detalles de la novedosa franquicia creada por un chef andaluz, Pepe Rosales, y un ejecutivo, Francisco Romero, gerente y propietario de la Escuela Profesional de Hostelería de Jerez. Saludo la iniciativa porque, de esa forma, podré disfrutar en cualquier buen restaurante de la piel de toro de las recetas mediterráneas de Rosales, criado en los fogones de buenos hoteles como el Alfonso XIII ó el Royal Sherry Park. Innovar en alta cocina. Espero que el consejero de Innovación, Ciencia y Empresa sea amante de la buena mesa. O mejor, que la orden de incentivos les valga a Pepe y Paco.