Hey, buenas. ¿cómo anda tu corazón? No te quejes, que la cosa está mú malita pa tó el mundo. La gente es buena por naturaleza y el que no se queja es porque se lo monta DPM sin pensar en nadie. Esperando un pelín estamos, a que la cosa mejore, a que llegue un año mejor que éste cabrón que se va. Acabo de sacarme un par de entradas para el único concierto de Bon Jovi en España, el año que viene. Hace frio al fìn, cojones, ya era hora, porque entre las conferencias del cambio climático que estoy preparando y el calor pringoso que tenemos por aquí en el sur del sur, estoy mú preocupao. He decidido poner en paz mi alma con todos y con todo, aplicarme a rajatabla lo de la honestidad radical, que, por sus primeros resultados, deja estupefacto a mis allegados/as. No entiendo cómo una persona puede tener la mala leche de impedir que otra, que nunca le hizo el más mínimo rasguño, pueda trabajar feliz en lo que le gusta. Eso ocurre y el castigo llegará solito, siempre llega. La misma medicina que uno suministra al prójimo te la tienes que tomar al final, sin remedio, querida mojigata de la bahía. Os dejo un vídeo de Bon Jovi, para despedirme esta madrugada. Toca dormir, y pasear hoy sábado, respirar aire fresco y gritar a los cuatro vientos que nada ni nadie te va a cambiar. Os quiero (si os suena cursi, iros a tomar por culo, panda de desagradecíos).
