Está ofuscado Rajoy con aquellos que le dicen lo que tiene que hacer a diario, sean editores, políticos (dentro y fuera de su partido), con buena o mala intención. "No voy a comprometer mi independencia, es lo que tengo", me dijo ayer, en la finca Las Hazuelas, en Grazalema, tras la foto con los quesos payoyos que hoy publican la mayoría de los medios de comunicación escritos y ayer los de internet. A Rajoy le queda mucho en esta semana, veremos cómo concluye el debate de los Presupuestos, pero ayer, tras conversar casi media hora con el presidente del PP, ex ministro y candidato a la presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, llego a muchas conclusiones.
La principal es una pregunta, porque que si la tormenta perfecta (Gürtel) se abate sobre el PP cómo es posible que las encuestas otorguen tantas posibilidades al partido de la oposición, que el cambio, la alternancia sea posible por ejemplo en Andalucía. La tasa de paro seguirá creciendo en los próximos meses y cerrará el 2009 en una media del 18,1%, cifra que alcanzará "máximos históricos" en 2010 al escalar al 20,1% debido a que la mejora del mercado laboral se hará esperar "más de lo deseado", según el último informe mensual elaborado por La Caixa. Y es eso lo que preocupa a la gente en estos, el paro, la crisis, que les arreglen los problemas diarios.
El PP debe resolver con rapidez y precisión sus problemas de corrupción, llegando hasta donde haga falta pero no puede dejar que nada le distraiga de la economía real, de solventar los problemas tal como le demandan los ciudadanos. Y de eso hablamos ayer, junto a otros compañeros, como Carlos Juan (Onda Cero), Mauricio (Europa Press) y Manuel Estévez (Cope y El Mundo), y con muchos militantes de base, que nos aportaron otros puntos de vista, a nosotros y a sus dirigentes. Difícil coyuntura.