¿David contra Goliat? No se me ocurre mejor símil para explicar lo que está sucediendo en el proceso de elecciones a decano del Colegio de Abogados de Cádiz. Solo que se presenta a decano un abogado de la calle, del turno de oficio, con ganas e ideas. Se llama Luis Morillo.
En un blog creado al efecto afirma: "Me he presentado como cuando me tiro al agua para practicar la pesca submarina...pienso en una frase de Séneca que decía: "Recuerdo cuando era experto nadador de agua helada..." y me tiro sin pensarlo más. Pues igual. Y este decano actual parece que ha perdido los estribos (visualicen unos estribos sin pies que los llenen) de manera que me he dado cuenta que lo que no haga yo no lo va a hacer nadie. Y mira que llevo años quejándome del coste psicológico que supone para un abogado mantener una clientela que tiene que aguantar 2 años de prisión preventiva con el expediente parado, o, que un cliente esté en la indigencia mientras que le tarda un ordinario para cobrarle a un moroso dos o tres años". Esto puede estar interesante.