La oreja de Van Gogh -
El ambiente se enrarece por momentos. Los sindicatos se desesperan ante los impagos y comienza a prepararse una macro manifestación de 'indignados', y en el seno del PP hay una ola que crece por momentos, la de los partidarios de ajustar las cuentas a la anterior regidora, Pilar Sánchez, del PSOE. Se trata de voces que, sorprendentemente, ignoran a Pedro Pacheco y su responsabilidad global de la situación económica. Ese ajuste de cuentas, según se supo ayer, pasaría por varias acciones políticas y penales para situar la responsabilidad del desastre económico en el PSOE y usar el asunto como ariete en esta etapa preelectoral. La cosa es que parece que nadie tiene culpa de lo ocurrido y hace falta un cabeza de turco. Hay actores en esta película interesados en terminar su faena, la del complot.
Pero aunque las formas no es el fuerte del PP -en Jerez domina la trastienda el ala más dura del partido- a Pelayo no le queda otra que hacer lo que va a hacer hoy: intentar eliminar las prebendas, los sueldos galácticos, poner fin a una etapa de vacas gordas, de gentes que entraron por la gatera. Una pena que en esta contienda el sector ultra imponga su fatal criterio. Se van a equivocar de plano. Triste. Pero eso no exime de razón a Pelayo, que debe hacer en estos primeros meses todo lo necesario, algo que no ocurrió con Pilar Sánchez. Dentro de cuatro años todo esto será papel viejo, historias que contar...
Pelayo tiene claro que ha de seguir adelante y su política de comunicación hace aguas, se sabe todo. Situar a una persona, con todos los respetos, sin gran experiencia en comunicación institucional, al frente de la estrategia es un error. Y eso, recuerden, le pasó factura sin remedio a Pilar Sánchez, tal como los propios socialistas reconocen a menudo. Una cosa es ser agradecida con sus colaboradores y otra, bien distinta, la comunicación global del quinto ayuntamiento de Andalucía, con gravísimos retos y crisis. Pero la política es así. Aunque un nuevo nombre planea por el consistorio de cara a enero de 2012.
