26 nov 2008

Lo de Felipe y Carmen


A la hora de producir me conecto la radio bajita y dejo al fondo Telecinco. Subo el volumen cuando veo a Felipe...y mi adorada Ana Rosa (antes de su éxito en Cuarzo, con huevos en todas las cestas mediáticas) y al todoenuno Jaime Peñafiel que cuentan lo del ex presidente, ya saben. Les juro que me quedo de piedra, pero así es la vida, si es que es así. Me gusta la crónica de Beatriz Cortázar y ahora comprendo muchas reacciones en algunas trincheras mediáticas tras lo del bulo sobre Aznar y la ministra francesa.
Este país había mantenido a los políticos al margen del tomateo del corazón, pero ya no hay escapatoria. A mí, que la gente quiera seguir siendo feliz, que acabe y comience historias me parece fenomenal. Y me toca los cataplines tanto meapilas y progre gay que me refriegan eso del derecho a la intimidad cuando a ellos no les toca. Felipe, pischa, que seas feliz, que la vida es corta y algún día te tenía que tocar. Y que los fariseos se vayan a tomar por saco, nos vemos en cualquier foro nuclear, ex presidente. La última vez que hablé, algo, con los dos, fue en el entierro de Alfonso Perales. Nada es para siempre. A vivir...y salud querida Carmen, que son dos días y medio. Una canción, con cariño, para los dos.