Blanco, con gesto preocupado, hoy en la Comisión de Fomento.
Me cae bien este tipo, Salvador de la Encina, diputado socialista y presidente de la Comisión de Infraestructuras del Congreso. Es el que habla más claro en la 'tribu' socialista: Hoy ha admitido que habrá que buscar recursos "de carácter extraordinario" para intentar que el segundo puente de la Bahía de Cádiz pueda estar listo en el año 2012 aunque ha advertido que esta empresa "no es fácil". En declaraciones a los medios de comunicación tras finalizar la comparecencia del ministro de Fomento, José Blanco, en la Cámara baja, De la Encina ha confirmado que esta obra se encuentra entre las reprogramadas debido al recorte de 6.400 millones de euros que sufrirá el presupuesto inversor del departamento en el periodo 2010-2011.
Según ha detallado posteriormente De la Encina, esa solución específica pasa por negociar con la empresa adjudicataria de los trabajos, Dragados, si "hay una posibilidad de cumplir con el 12" y, por otra parte, buscar en el Ministerio de Economía recursos de carácter extraordinario para el departamento de Fomento. En su comparecencia Blanco ha dicho que el puente no es un mero acceso a Cádiz sino "una infraestructura de suma importancia en todo el área metropolitana de la Bahía" y el diputado gaditano ha señalado que el ministro le ha transmitido que no sólo es una prioridad sino "la primera", por el volumen de inversión que conlleva, el valor de la conmemoración del Bicentenario de la Constitución y por lo que supone para favorecer la movilidad de toda la Bahía, de ahí que esté buscando recursos.
Así, ha destacado que el Ministerio va a hacer "todos los esfuerzos para ver si se puede cumplir con el compromiso que estaba señalado" y ha indicado que, en cualquier caso, obtener un resultado positivo de ese trabajo "no es fácil". Por el momento, según ha señalado De la Encina, habrá que esperar a mediados de septiembre, cuando el Gobierno presente el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año para conocer la inversión que recibirá, que estará recogida en la programación plurianual de 2011 a 2014. Lo dicho, De la Encina, amén de ser realista, es el más correcto. Y eso le honra.
